De noche, quiero ser
su insomnio
Y todo aquello a lo
que se aferra a mitad de madrugada.
A todas horas, quiero
ser su aire
para que me respire despacito.
Siempre, quiero ser
su fuego
Y que podamos arder
juntos.
De madrugada, quiero
ser su tormenta
Para que en medio de
truenos no tenga miedo.
A todas horas,
quiero ser su locura
Y que se adentre en
mi universo
De noche, quiero ser
su estrella
Y cuando mire el
cielo me sonría un poco más.
Al amanecer, quiero
ser su tiempo
Y que se pierda
conmigo.
Siempre, quiero
acobijarme en su pecho
Y que se joda la
ciudad.
Toda la vida, quiero
ser su “algo”
Y quedarme a vivir
en nuestra efímera eternidad.