“Quién vive en el pasado es un museo andante”

Debo confesar que llevo días siendo un verdadero “museo andante”. No es lo que quiero, pero por desgracia es muy cierto, mis pensamientos insisten en vivir en el pasado, insisten en sacar los recuerdos de baúl, las cosas de las cuales salí del pasado no deben perturbar mi presente, las cosas se tenían que quedar ahí, en el fondo de mi memoria pero ellas insisten en regresar y es entonces cuando todo comienza de nuevo, no soy yo la que vive en el pasado, sentada o de pie ellos regresan y aquí me encuentro viviendo en el pasado, como los museos tengo cosas valiosas y antiguas. Lo que llevo en mi mente es exclusivamente de los recuerdos, insisto no debería ser así pero aquí van caminando entre los hilos de mi memoria “No lo puedo dejar de sentir, no puedo, me duele, me aplasta”. Todos esos momentos perdidos en el pasado, todos esos momentos falsos que me obligaron a vivir, hoy sé que me hicieron  crecer. Yo quiero tener el control de mi mente, quiero bloquear mis sentimientos (imposible) y conseguir un buen anti-virus sería excelente para un museo andante como yo.

“No quiero hacerme daño con las cosas viejas, no quiero ser este “museo andante”.