sábado, 30 de julio de 2016

Entre la vida y la muerte


Esta vez no estoy perdida, no necesito una brújula como siempre, tampoco me hace falta un mapa, ni una ruta. Esta vez no tengo a donde ir, no hay nuevos caminos. Esta vez no soy víctima, soy la culpable. Me encuentro detenida y no sé qué es peor, si estar perdida o estancarse por no tener un sitio a donde ir. No veo hacia delante pero tampoco me detengo a mirar atrás, solo estoy viendo el presente que tengo ahora. Aunque exista siempre la posibilidad de que algo o alguien me haga recordar lo que deje atrás, no lo hago. Irse es fácil, recoges tus cosas y te vas. Lo difícil es quedarse aun sabiendo que no hay más camino por recorrer, aun sabiendo que las horas si están contadas y que cada vez el hilo invisible se tensa más. Cada día que pasa sigues viendo como todo lo que te pasa por delante de tus ojos cambia y avanza menos tú. Pasas a ser un recuerdo de lo que fuiste y comienzas a desvanecerte. Te vas dando cuenta que el mundo sigue su curso estés o no. Te detengas o no, decidas irte o quedarte. Todo cambia, todo evoluciona, nada permanece quieto por un largo tiempo, excepto tú y tus pies amarrados al suelo. Entonces no te queda otra que resistir a quedarte estancado e intentar salir de ese pequeño agujero personal que esta entre la vida y la muerte y que tú mismo te estas cavando.

 Irse es fácil, lo difícil es quedarse sabiendo que aunque te vayas no tienes sitio a donde ir.

“Pero de eso se trata la vida no? De aventurarse.” 

martes, 19 de julio de 2016

Cuando tu olvido llega


Siento cada vez que me olvidas. Cuando le prometes lo mismo que a mí. Cuando le enseñas cada día lo fácil que es amarte y le regalas tu sonrisa…Esa que me regalabas a mí.
El olvido se hace presente cuando estas junto a ella, cuando le robas suspiros y pensamientos, como a mí. Cuando no buscas que su amor se parezca al mío. Incluso cuando aun abrazándola piensas en mí. Espero que puedas contarle que todo lo que le enseñas a ella lo aprendimos juntos.

Cuéntale como aprendiste a detener el tiempo con tan solo juntar nuestros labios. Como aprendiste a decir te quiero en medio de un cálido abrazo, como no necesitaste mucho tiempo para quererme así. Cuéntale como me olvidas, cada vez que la abrazas y buscas en su cintura mi calor. Cuéntale como nos quisimos como si el mañana no existiera y que aun estando junto a ella, guardas en tu pecho la esperanza de nuestro futuro juntos.


Dile como aun anhelas revivir nuestra historia solo para asegurarte que ya no sientes nada. Duele y sé que me olvidas cuando amaneces con restos de otra piel, cuando le hablas y yo siento tu olvido desde acá. Cuéntale que cuando callas es porque mi nombre quiere salir de tus labios, cuéntale como no luchamos por estar juntos, como ella termino en medio de un partido de dos. Dile amor mío como aprendiste a trazar líneas en mi espalda y cuéntale que cada vez que le dices te quiero es porque estas convenciéndote a ti mismo que ya no me quieres a mi.  

sábado, 9 de julio de 2016

Déjela ser feliz


Infinitas ojeras se pasean por debajo de sus ojos, tiene tantas como el odio que siente hacia la rutina. Por su cabeza transcurren miles de sueños y ella solo busca decorar su alma con letras y amaneceres. Quiso tanto a alguien que termino por romperse, su sonrisa esta caída y es la prueba de los estragos que la guerra en medio del amor le ha dejado. Creo que en el fondo prefiere pasar horas perdidas buscándole respuesta a todas las preguntas de su cabeza. Sus piernas están cansadas de andar en medio del desierto en el que ha transformado esa habitación gris llena de colchones. Ha perdido interés, ya no le importa si es hoy, ayer o es mañana, para ella todos los días en ese lugar son iguales. Cada noche ella busca cerrar los ojos y perdonarse por haber dejado su alma desparramada. Todos los días busca curarse las heridas sin pensar en que alguien podría interesarse en curarle el alma. Quizás otro día tome en cuenta esa acción. Por ahora, solo se mira al espejo y analiza su reflejo, por un instante ella olvida el desastre que lleva adentro, por un instante vuelve a ser lo que era antes y olvida que lleva años encerrada ahí dentro.


No sé cuánto tiempo dure la ataraxia que lleva consigo, pero déjela ser feliz Doctor, que ella merece ser feliz, así sea un momento.